CHINA OFFICINALI / CINCHONA SUCCIRUBRA

CHINA

Elaborado a partir de la quina, el remedio China tiene una importancia histórica especial para los homeópatas. La corteza fue la primera sustancia que Hahnemann probó en su propio organismo, registrando así la primera prueba de un medicamento en homeopatía. Anotó que, en dosis elevadas, la quinina, que se extrae de la corteza, produce síntomas similares a la malaria, enfermedad que cura. En la actualidad, la China es un remedio importante para el agotamiento.

USOS CLAVE

Agotamiento nervioso como consecuencia de trastornos debilitantes

Debilidad que se produce por una gran pérdida de fluidos corporales. por ejemplo por sudoración, diarrea o vómitos.

PERFIL DEL REMEDIO

Nombres vulgares Quina, corteza de cinchona, corteza de jesuita.

Fuente Originaria de los bosques tropicales ale América del Sur, ahora crece en la India, Sri Lanka, y el sudeste asiático.

Partes utilizadas Corteza seca.

ENFERMEDADES TRATADAS

La China se utiliza sobre todo para el agotamiento nervioso que resulta de una enfermedad debilitante, la debilidad provocada por el amamantamiento o una pérdida excesiva de fluidos corporales, por ejemplo, por la transpiración, los vómitos o la diarrea.

Este remedio también es bueno para los siguientes trastornos: dolores de cabeza que mejoran al aplicar una presión firme sobre la zona dolorida, pero que empeoran con el roce ligero, como por ejemplo, el cepillado del pelo; neuralgia; convulsiones; mareos; zumbido (de los oídos); tirones musculares asociados con fatiga: y hemorragias nasales y de otro tipo.

También se administra en los casos de sudoración abundante, temblores y sofocos con fiebre o sin ella. Mientras transpira, la persona se niega a beber, pero desea hacerlo cuando siente escalofríos. La tez se ve amarillenta y cetrina y la piel se muestra muy sensible al más ligero roce.

La China también actúa sobre el aparato digestivo y es aconsejable para tratar la gastroenteritis, los problemas de vesícula y flatulencia exacerbada por el movimiento.

La China resulta útil para el tratamiento de síntomas mentales que incluyen falta de concentración, apatía e indiferencia. nerviosismo y estallidos de ira poco característicos. El sueño puede resultar agitado y difícil.

Las personas que necesitan este remedio pueden tener los tobillos hinchados, sufrir indigestión que no se alivia con los eructos y la sensación de que los alimentos están atascados detrás del esternón. Les disgustan la manteca v los alimentos grasos y desean consumir alcohol.

Los síntomas mejoran Al dormir; con lo templado; al aplicar una presión firme sobre las partes afectadas.

Los síntomas empeoran Con el frío y las corrientes: por la noche; en el otoño.

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