Chestnut Bud - Brote De Castaño De Indias

Los caballos son animales inteligentes, de grandes cabezas, poseedores, si se los compara con las vacas, de un aspecto despabilado y vivo. Aunque los etólogos lo nieguen, según las creencias populares los caballos son particularmente listos. Los ingleses llaman horse sense al sentido común que se manifiesta como armonía entre el mundo interior de las ideas y las circunstancias externas, horse shit, en cambio, significa un disparate total.

Quien haya montado un caballo verdadero, no un caballo de circo súper-amaestrado, sabrá muy bien que el animal también exige vigilancia y serenidad por parte del jinete. Los jinetes distraídos o soñadores desatentos serán arrojados al suelo por el caballo. Más de un jinete desprevenido ha sido barrido del lomo de un caballo que, en un pequeño despliegue de genuino «humor equino» ha pasado al galope por debajo de las ramas bajas de un árbol. Un buen jinete ha de desarrollar sobre todo una cualidad, la resolución. Los primeros pueblos de jinetes, que llegaron a dominar grandes regiones del mundo, adquirieron esta cualidad en su trato con los caballos.

No obstante, a pesar de su inteligencia, los caballos suelen cometer repetidamente el mismo error. Siempre retroceden ante el mismo arbusto o zanja donde una vez les sucedió algo desagradable. A menudo los caballos que participan en concursos hípicos yerran el salto en el mismo obstáculo. Suelen mostrar una terquedad que el siguiente proverbio inglés pone de relieve: «You can lead a horse to water, but you can't malee it drink!» [Puedes conducir el caballo hasta el agua pero no puedes obligarlo a beber].

Las propiedades aquí descritas recuerdan fuertemente el tipo Chestnut Bud caracterizado por Edward Bach. Se trata de personalidades que tienen dificultades para relacionar sus ideas con la realidad externa, que siempre incurren en los mismos errores. Se asemejan al caballo que no sigue las indicaciones del jinete. La esencia de brote de castaño de Indias ayuda al caballo (la inteligencia natural) a percibir mejor los impulsos del jinete (el Yo Superior).

Observemos los hermosos brotes del castaño de Indias que Edward Bach transformó en remedio floral mediante la potenciación por ebullición: diez a dieciséis escamas pardas, coriáceas, solapadas a modo de tejas y pegadas con resina protegen el delicado retoño embrional de la flor oculto en el brote y las diminutas hojas embrionales cubiertas de un denso fieltro blanco.

Es una estructura preciosa que contiene todo aquello que aparecerá, a modo de explosión, durante los cálidos días de abril y mayo.